Julio Mathieu, otro vecino olvidado

 







  En febrero de 1931 el nombre de Julio Mathieu se encontraba en boca de muchos vecinos de Villa Ballester debido a una noticia que causó asombro y conmoción.

  Ocurrió que un grupo de linyeras había ocupado una vivienda precaria y abandonada ubicada en uno de los extensos terrenos que Mathieu tenía en el paraje kilómetro 24.  

  Cuando la policía llegó al lugar altertada por los vecinos, se llevó una gran sorpresa al descubrir que en las paredes interiores, se encontraban pegadas fotografías del anarquista Federico Di Giovani, quien había sido fusilado recientemente. 

  Esta situación motivó gran preocupación y se le solicitó a Mathieu que procediera a la demolición de la vivienda de inmediato. 

Resaltado en color verde las propiedades de Julio Mathieu en 1930.  En amarillo el terreno donado para la apertura y continuación de la calle Margarita Abella Caprile 

   Julio Mathieu fué uno de los principales propietarios de tierras en el Kilómetro 24.   Siempre con bajo perfil, participaba en forma desinteresada con colaboraciones económicas y donaciones.   Basta como ejemplo la donación de $200 que realizó en junio de 1934 a la Comisión Liga de Damas Católicas Parroquia Nuestra Señora de La Merced, que tenía como fín costear la colocación de las escaleras de mármol para la iglesia.

   También es destacable la donación que aceptó realizar por el insistente pedido de los vecinos del terreno necesario para la apertura de la calle Reina Victoria, entre las calles Solís y Biarritz, en agosto de 1936.  

   Cabe destacar que la negativa inicial de Mathieu no se enfocaba precisamente en la donación del terreno, que nunca estuvo en duda, sino que al hacerla, estaba automáticamente comprometido a abonar el pavimento de la calle abierta, por no estar contemplada en el plan de pavimentos aprobado por el consejo Deliberante.
    
   Ese generoso gesto significó un gran progreso para la zona, dado que la calle Reina Victoria pasaba a tener continuidad con Margarita Abella Caprile hasta empalmar con Bernabé Márquez, en el Kilómetro 24.

   Otro de los Mathieu, Graciela Mathieu Klein, sería integrante de la Sociedad Pro Oratorio del Sagrado Corazón de Jesús de Villa Klein y Gregorio Mathieu donaría en 1935, dos lotes en Villa Leone para que se construyera allí la Escuela n°40.-

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